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Aquí encontrarás respuestas a las dudas más comunes relacionadas con PAR y la Ley Karin.
El acoso sexual es toda conducta de carácter sexual no consentida, que puede incluir insinuaciones, comentarios, gestos, promesas de beneficios laborales a cambio de favores sexuales, o cualquier acto que atente contra la dignidad de una persona en el ámbito laboral. Estas acciones pueden ser realizadas por un jefe, supervisor o compañero de trabajo.
Es cualquier acto, conducta o comportamiento agresivo, ya sea físico, verbal o psicológico, que ocurre en el entorno laboral y afecta la seguridad, dignidad o bienestar de los trabajadores. Según la Ley Karin esta es ejercida por terceros, ajenos a la relación laboral, como clientes o usuarios.
Una denuncia verbal es aquella que el trabajador presenta oralmente, sin un documento escrito, sobre una situación de acoso laboral, sexual o violencia en el trabajo. La Ley Karin permite este tipo de denuncias, siempre que sean recibidas por personal designado, registradas adecuadamente y derivadas al área correspondiente para su investigación. Este mecanismo asegura que todas las denuncias sean tratadas en tiempo y forma.
El acoso laboral es cualquier forma de hostigamiento o agresión ejercida por el empleador o los compañeros de trabajo, ya sea de forma reiterada o en un solo evento. Este puede manifestarse a través de humillaciones;, maltrato;, exclusión;, asignación injusta de tareas; o cualquier acción que dañe la salud mental;, física, o la situación laboral de la persona afectada.
Según la Ley Karin, toda denuncia debe ser investigada sin realizar un juicio de admisibilidad previo. Esto significa que ninguna denuncia puede ser desestimada antes de iniciar una investigación formal. Las empresas deben garantizar un proceso imparcial que incluye entrevistas, recopilación de pruebas y la adopción de medidas para proteger a los involucrados durante la investigación. Además, deben cumplir con los requisitos formales establecidos por la normativa del Ministerio del Trabajo.
No, todas las denuncias deben ser presentadas por la persona que sufrió acoso laboral, acoso sexual y/o violencia en el trabajo.